Magdalena Valerio no me plantea perder el partido. “Pero si me tengo que quedar en la oposición, me quedaré, además, en exclusiva –ha dicho a Henares al Día-”. Entre sus propuestas concretas, llama la atención que quiere pelear por un proyecto de futuro como es “una nueva estación de Renfe digna”.
¿Qué propuestas figuran en el programa electoral de su formación en Guadalajara para favorecer la creación de trabajo en una ciudad con más de 7.000 parados?
Aunque un ayuntamiento no se puede convertir en creador de empleo, sí puede contribuir a fomentarlo. Ahora mismo el empleo público está topado, pero se puede ayudar a crear trabajo mediante cursos y talleres de empleo vinculados con áreas como la atención a la dependencia, dinamizando el centro, apostar por el sector logístico… Y para ello es fundamental la colaboración con otras administraciones
Sin duda, también habrá que reordenar el presupuesto y apretarse el cinturón en gastos corrientes, y si hay que ahorrar en fiestas se hará.
Si llega a la alcaldía, ¿qué medidas adoptará con carácter más inmediato?
Si soy alcaldesa reordenaré la Oficina Local de Empleo y Desarrollo y elaboraré un Plan Económico de Fomento del Empleo contando con los agentes económicos y sociales y el gobierno regional.
También concluiré tareas inacabadas. Hay que terminar de arreglar el Alcázar Real, recuperar las naves del Fuerte de San Francisco para una Casa de Cultura y un Museo para la Semana Santa, o para generar espacios donde se puedan reunir las asociaciones.
¿Tiene previsto dar marcha atrás a decisiones plenarias adoptadas por el actual gobierno municipal como la privatización del agua?
Lo único que sí haré sin ningún reparo es dar marcha atrás a la decisión del Ayuntamiento -con el apoyo del PP- que rechazó una moción para dignificar una fosa común de represaliados del franquismo. Me parece que los muertos de uno u otro bando que se produjeron en la guerra civil y en la posguerra tienen derecho a descansar con dignidad. Si ocurriese con personas de otra ideología también diría lo mismo.
También trabajaré para que en la contratación haya transparencia.
¿Figura en su programa alguna política de privatización de servicios municipales o subida de impuestos?
A priori no tengo pensado subir los impuestos, porque en principio me encuentro con un ayuntamiento saneado. Pero habrá que reducir gastos, algo que forma parte de la obligación de cualquier responsable político en cualquier administración pública. La política tiene que servir para resolver los problemas de la ciudadanía y dar cobertura a lo urgente. Para ello, vamos a crear un servicio de mantenimiento para las pequeñas cosas.
¿La crisis también se ha visto reflejada en su programa electoral municipal?
Está claro. Aunque el Ayuntamiento tiene todavía un margen de endeudamiento razonable, no podemos tirar la casa por la ventana. Haremos cosas pero con cabeza. No son momentos para obras magnas de millones de euros. Aunque no se puedan hacer grandes proyectos, sí podemos ampliar algunos, como los centros sociales, colegios e institutos en fines de semana y en períodos no lectivos, y construir centros de atención a la infancia. Hemos propuesto un CAI en el Fuerte y otro en Los Valles, y en Los Manantiales tenemos pendiente un Centro Social y de Día que quiero retomar. También está pendiente el Palacio de Exposiciones y Congresos, pero es la Cámara de Comercio la que debe mover ficha y decir qué lugar prefiere.
Quiero pelear por un proyecto de futuro como es una nueva estación de Renfe digna, que conecte la ciudad con el polígono del Ruiseñor, y estudiar el soterramiento de parte de la vía férrea. Yo visualizo una avenida por lo que podamos ir andando desde la ciudad hasta el Campus.
¿Tiene una propuesta concreta encaminada a la ayuda para la instalación de ascensores en las viviendas que lo necesiten?
Sí, pero eso no significa que el Ayuntamiento vaya a poner ascensores gratis a todo el mundo, sino que va a contribuir económicamente y va a ofrecer información sobre ayudas y subvenciones mediante la creación de una oficina de asesoramiento para la rehabilitación en general.
En mi campaña de puerta a puerta me ha conmovido encontrarme que hay personas prisioneras en sus casas: como no vaya algún hijo a bajarles a la calle, no pueden salir, y no son sólo mayores.
¿Qué opinión le merecen iniciativas como la tarjeta ciudadana que quiere poner en marcha Antonio Román?
Me parece buena idea. También soy partidaria de facilitar el acceso a los servicios públicos. Pero un sistema de bonificaciones es complejo. Lo más justo sería aplicar las bonificaciones en función de la renta de cada uno.
¿Qué me dice de “tocar” los sueldos o los liberados?
Si llego al gobierno, lo primero que haré será pedir un informe al interventor para ver como está la situación económica. A priori, no tengo intención de modificar nada; ya hubo en su momento una reducción de salarios. Hay funcionarios que cobran más que los propios cargos públicos.
Si gobierno, mi estilo no es llegar a la política de “al enemigo ni agua”, pese a que me han llegado rumores, que espero que sean absolutamente infundados, de que si gana Román, va a eliminar las liberaciones de los grupos políticos… No me parece positivo atornillar a los grupos de forma que no puedan tener una estructura mínima de funcionamiento para hacer su tarea.
¿Tiene intención de compatibilizar su cargo, si gana, con alguna otra responsabilidad?
He decidido dedicarme en cuerpo y alma a la ciudad de Guadalajara. No voy a compatibilizar el Ayuntamiento con ningún otro cargo público ni ninguna otra actividad privada. Es un sueldo digno el que se cobra, aunque no lo puede ver igual una persona parada que un directivo de una empresa.
En caso de no ganar, ¿continuaría en la labor de oposición?
Me planteo la opción de ganar el “partido”, no el escenario de perder. Pero si me tengo que quedar en la oposición, me voy a quedar, además, en exclusiva, no pienso compatibilizar el ser portavoz en el Ayuntamiento con ninguna otra responsabilidad, ni pública ni privada. Soy abogada y me podría montar mi despachito y a ganar dinero, pero no, me conformo con mi sueldo público, el que me corresponda.
¿Cómo ve las elecciones?
Las veo muy reñidas. Creo que hay partido. Soy consciente, y no quiero engañar a nadie, de que a priori, aquí en Guadalajara, el PP sale con un poquito de ventaja, pero tengo una convicción, y voy a pelear hasta el último minuto.
¿Cómo valora su campaña? ¿y la de su principal opositor?
Creo que estamos haciendo una campaña potente, imaginativa, con propuestas interesantes para los barrios, para recuperar nuestro patrimonio, la cultura y el medio ambiente, sin olvidar la apuesta por el desarrollo económico. Veo buen ambiente en la calle.
La idea de la “magdalena”, es una propuesta simpática de los jóvenes socialistas.
En cuanto a la del PP, hay algunas iniciativas como la del teléfono en las que Román llega un poco tarde; en cuanto a las cañas, es simpático, pero yo no tengo que improvisar ese tipo de medidas porque ya las puse en marcha hace tiempo.
¿Dispuesta a pactos si fuera necesario para que no gobierne la derecha?
Hemos gobernado ya con IU No me cierro a ninguna posibilidad, pero me gustaría conseguir la mayoría absoluta. Vamos a trabajar por ello, pero si tengo que coaligarme con IU, lo haremos. Soy persona dada al acuerdo, al consenso.
¿Su metodología?
Dedicación exclusiva, dedicación al ciudadano y trabajar también con los grupos políticos y con otras administraciones públicas, buscando el apoyo y no la confrontación.
Creo que se consigue siempre mucho más con respeto institucional y buscando acuerdos que con el victimismo y el enfrentamiento. Esa manera de hacer política no me gusta; si me viese obligada a ello, me iría a casa.
Hay proyectos que no prosperan por culpa del PP. Y no es justo, la Junta ha hecho muchas inversiones con gobiernos del PP. Hay que dialogar con el que gobierna, sea del partido que sea.
Por último, ¿tiene algún personaje real o ficticio con el que se identifica?
Me identifico como muchas mujeres y hombres a los que nos gusta complicarnos la vida y pelear por una sociedad más justa. Pero más con las mujeres, porque tenemos y hemos tenido un plus de complicación, la casa, los hijos…